La obra «Chaplin» de Maseda, creada en 2015, es una exploración de la iconografía clásica a través de la técnica del óleo. Maseda emplea una paleta donde predominan los grises y blancos, interrumpidos por toques de rosa flúor, para inyectar un elemento contemporáneo en la composición. Estos destellos de color no solo resaltan características físicas de Chaplin, como sus mejillas o los labios, sino que también aportan una dimensión expresiva y casi lúdica a la pieza.
La obra, de 114 x 146 cm, muestra a Chaplin con su característico sombrero y traje de época, mirando directamente al espectador, con una mirada penetrante que refleja la complejidad de su carácter y la época que personificó. El fondo, realizado en colores que contrastan con la figura principal, sugiere un ambiente más abstracto y emocional que contextualiza al personaje en un espacio que va más allá de la pantalla del cine.
En su conjunto, la pintura refleja una etapa temprana de aprendizaje de Maseda, donde se percibe la búsqueda de equilibrio entre el respeto a la tradición y la incorporación de elementos modernos.